Según la tradición, las artes marciales tiene su origen al norte de la India, siendo un monje de nombre Bhodidarma quien las creo al observar la forma de combate de los animales y los condensó en una forma llamada Los doce Movimientos. Su origen se estima por los años 500- 800 D.C. Este monje ingresó a la China y enseño su arte de los doce movimientos a nativos del norte chino.
Durante la dinastía Yuan (1260-1368) un joven llamado Yen se hizo monje y tomó el sobrenombre de Chueh Yuan.Chueh Yuan estaba muy interesado en el pugilismo chino y estudió los doce movimientos de Bodhidharma y los convirtió, mejorándolos, en 72 movimientos.Éstos se esparcieron por toda la China, pero Chueh no estando aún contento de su ampliación de los movimientos, viajó por todo el continente para probar sus métodos.Un día, de camino, presenció un ataque a cargo de un joven, con un viejo buhonero (vendedor ambulante).
El joven, intento darle una patada pero el viejo esquivó el golpe y tocó el pie del joven con dos dedos de su mano derecha. El joven cayó al suelo inconsciente. Chueh Yuan quedó muy impresionado por lo que había hecho el anciano, habló con él y pronto se hicieron amigos. El viejo se llamaba Li Ch'eng.Li contó a Chueh Yuan que él no tenía grandes conocimientos de pugilismo, pero le presentó a su amigo Pai Yu Feng de Shansi, maestro de gran renombre en numerosas provincias.
Pai Yu Feng, tenía entonces unos 50 años, era de talla media, carácter enérgico y de gran inteligencia.Cuando Chueh Yuan, Li Chéng y Pai Feng se encontraron reunidos, dieron sus opiniones y sus puntos de vista sobre el pugilismo. Los tres marcharon al monasterio del shaolin y convirtieron los doce movimientos de Bodhidharma y setenta y dos de Chueh Yuan en 170 movimientos que son el fundamento del Shaolin actual.Este sería el origen del Kung Fú. Del Kung Fú se desprenden la mayoría de las variantes de artes marciales, incluido el Karate o Kara-té, el Tae Kwan Do y el Kempo.
La enseñanza de las artes marciales fueron restringidas a templos gobernados por monjes luchadores Shao Lin, por varias centurias, donde fueron cada vez más perfeccionadas y adaptadas para una efectiva confrontación.
Más adelante se incorporan el uso de armas adicionales como el Bo (palo), Zan-shaku (vara dividida en tres secciones) y las espadas.
Las proezas físicas de estos monjes guerreros fueron y son legendarias aun hoy en día.La apertura de la enseñanza del Kung-Fú se debió principalmente a monjes expulsados de los templos, quienes a su vez fundaron escuelas de variados estilos para poder financiar su manutención.
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